Alberto Jiménez Merino
Director de la Comisión Nacional del Agua
del Gobierno de la República en el Estado de Puebla
Así lo he visto desde la
elección de jefe de grupo en la escuela, director de facultad, rector de Universidad, comisariado
ejidal, mesa directiva de colonos, presidencia de colonia, presidente de junta
auxiliar, presidencia municipal, gobernador del estado, presidente de la
república, dirigencia sindical y similares.
Tener el poder ha sido un gran
anhelo del ser humano. Todos quieren tener poder, ser famosos y ser ricos según
Dennis Waitley en su libro Para ser el Mejor. Pero muy pocos saben cuánto
poder?, para qué lo quieren?, famosos en
qué o que tan ricos?
Acceder al poder es más por
invitación que por deseo, según Alex Rovira en su libro Los Siete Poderes, muy
recomendable para los jóvenes que inician su incursión en la política pública.
Es un proceso de preparación gradual donde se van superando temores y
tentaciones que pueden hundir a gobernantes que abruptamente llegaron, sin
preparación para los cargos a desempeñar.
En todos los procesos políticos
vividos he visto infinidad de aspirantes
con o sin posibilidades reales. Todos buscando la circunstancia y la
oportunidad. Aunque nunca hay circunstancias favorables porque éstas se tienen
que crear.
Primero hay que saber para que
se quiere el poder, cual es el proyecto que se necesita y después quien lo
puede coordinar y dirigir. Primero, entre todos definir lo que debe hacer el
próximo dirigente o gobernante.
Lo anterior es muy importante porque
después de haber elegido ya casi no se vuelven a reunir los integrantes de las
organizaciones, muchos por estar en desacuerdo con la decisión, entonces aprovechemos su participación previa
para conocer sus propuestas.
Por eso me parece muy
importante la convocatoria realizada por Enrique Ochoa Reza y Jorge Estefan
Chidiac Dirigentes del Partido Revolucionario Institucional PRI a los actores
políticos de Puebla en la semana que recién terminó.
Al margen de posiciones y
reclamos que son inherentes a este ejercicio convocado, quiero dejar constancia
de mi felicitación al comité Ejecutivo Nacional del PRI por la oportuna reunión
de la que sin duda salimos fortalecidos y motivados frente a los retos que
representa el 2018.
Y lo más destacado fue
plantearnos para que quiere el PRI conservar el poder en el País y recuperarlo
en Puebla?. Cuál es la oferta política de nuestro partido para los poblanos? Cuál es la visión que tenemos para nuestro
estado. Y también, cual es la estrategia que definiremos para tener éxito.
Las preferencias electorales hoy de cara al
2018 están divididas en tercios, entre
las tres principales fuerzas políticas. No se puede asegurar nada para nadie.
Pero con trabajo y una gran oferta a la ciudadanía podemos ganar su
preferencia. Puede ganar el PRI.
Puede ganar el PRI, si con su
experiencia y estructura es capaz de convencer que requerimos poner castigos
ejemplares contra la corrupción, nuevas
fórmulas para revertir la inseguridad pública que lastima a la sociedad, políticas
novedosas para eliminar de fondo la pobreza que nos ha lacerado por décadas y
si somos capaces de atender el grave deterioro de los recursos naturales que
amenaza a las futuras generaciones.
Puede ganar el PRI, si se
entiende que muchos de los problemas existentes tienen su origen en una
educación distanciada de las necesidades de las familias y los sectores
productivos y que la investigación científica ha sido apoyada en forma
insuficiente para apalancar el desarrollo tecnológico.
Podrá ganar el PRI en Puebla
si logra poner en el centro de las prioridades, recuperar el respeto y apoyo a
las Juntas auxiliares, si propone privilegiar con acciones reales el combate a
la pobreza del 60% de poblanos que hoy la padecen, de apoyar sustantivamente al
sector agroalimentario, el abasto de agua y la limpieza de ríos. Apoyar el
desarrollo de las 7 regiones según sus recursos y vocaciones.
Pero sobre todo podrá ganar el
PRI si trabajando juntos, posiblemente unidos, recuperamos y aplicamos sus principios y ponemos
el servicio a la gente en el centro de las futuras políticas públicas.